Hijo de padre estadounidense (de Ohio) y madre madrileña, es un adolescente que con tan solo 14 años se convirtió en el jugador de baloncesto en silla de ruedas más joven de la historia en disputar la Champions Cup, la máxima competición continental de su disciplina. Para Stix, que nació con una parálisis en sus miembros inferiores, no existen los límites y eso le ha llevado a convertirse en profesional del baloncesto sobre ruedas con el CD Fundosa ONCE. Una joven promesa del deporte que sabe mejor que nadie lo que significa superarse. Como él dice “La única forma de descubrir tus límites es ir siempre un poco más allá”. Stix está volcado ahora en el baloncesto en silla de ruedas aunque no es el único deporte de su vida. Ha practicado la natación varios años y también compitió en esquí, donde llegó a ser campeón de España sub-18. También toca el saxofón desde los seis años y ya sueña con sus futuros estudios a ser posible en alguna rama científica.